Hoy os voy a enseñar un experimento que hemos hecho el fin de semana en casa.
Hace
tiempo leí, navengado por internet, qué hacer con la ceras de colores
de los niños cuando se rompen y ya no podemos pintar con ellas. Yo antes
las tiraba pero esta vez las he ido guardando con intención de
!!DERRETIRLAS¡¡ Si, si, has leido bien, podemos darle una segunda vida a
las ceras.
El sábado por la mañana nos pusimos manos a la obra
mi peque y yo y las separamos por colores en moldes de magdalenas de
silicona aptos para el horno. Fue muy divertido porque así, además, trabajamos los colores.
Luego calenté el horno a 240º y las metí. Poco a
poco las ceras se fueron derritiendo y se fueron mezclados los colores.
Cuando se derritieron las saqué del horno, con cuidado de no
derramar nada, y las dejé enfriar.
Y este es el resultado
obtenido, nuevas pinturas con forma de magdalena. Te puedo decir que las
he probado y pintan maravillosamente y, además, dependiendo de cómo las
uses puedes mezclar diferentes colores.
Te animo a probarlo y a contarme los resultados......
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